"Los afanes de una vida"
Artículos en los semanarios jaqueses
"La Unión" y “El Pirineo Aragonés

JUAN LACASA LACASA

 

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CONCIENCIA DEL MOMENTO Y VISIÓN DE FUTURO

23/06/1995

Obsesión de quien firma son las comunicaciones, vistas instintivamente desde la perspectiva local jaquesa, pero a la vez con ampliación a nuestro contorno en dimensión discreta. Tomemos un círculo entre cien y ciento cincuenta kilómetros de radio, entre Norte, Sur y Este y Oeste, en una geografía condicionada por los ríos y una topografía montañesa. En ese círculo cabrían más o menos Zaragoza al Sur, y Pau al Norte, Pamplona al Oeste y al Este la no demasiado distante tierra catalana. Es una amplía porción del Noroeste español, con Ebro y Pirineo gruesamente encajadores.

Lo que hay hoy se ha hecho, por ejemplo en los últimos cien años y en este final del siglo XX se vive un movimiento acelerador. Olvidemos una geopolítica demasiado distante, con la evocación de calzadas romanas y Camino de Santiago. Pensemos que el ferrocarril arrancó decimonónico, hoy se transforma y en el siglo XXI será muy distinto. A la vez hay que considerar el esquema español de autopista, autovía o carreteras de gran tráfico, como elementos que nos pueden afectar.

Es primordial el eje del Ebro a los pasos pirenaicos centrales. Es para sentirse optimista el ritmo presente que alcanza grado de contrata para autovía en los tramos carreteros desde Villanueva de Gállego a Huesca por Zuera y Almudevar y seguir rápidamente a Nueno, como pie llano ante el prepirineo de Monrepós. Todo eso anda más o menos avanzado, pero con perspectiva global muy esperanzadora.

Atención deben prestar la opinión, los usuarios y las autoridades responsables al recorrido tras Monrepós hacia Sabiñánigo, Jaca y Canfranc con la boca del nuevo túnel. El Ministerio de Obras Públicas inicia estudio, si no para la deseable autovía, sí para carretera de gran tráfico.

La actividad presente es ese túnel que hemos tenido la suerte de visitar estas fechas muy detalladamente hasta el fondo perforado del lado español, con más de un kilómetro, y el inicio de galería hacia el punto central partiendo del túnel ferroviario. Nuestra impresión de viejos e impenitentes canfranquistas es la del carácter subsidiario que es patente está alcanzando el túnel ferroviario de 1908-1912. Se paralizó el tráfico desde 1970, ha servido para altas experiencias físicas estos años y ahora camina a resultar un adminículo del nuevo, tanto para acelerar la construcción, como para servir de auxilio al futuro tráfico carretero en caso de accidente.

Mayor aprensión y más dudosa esperanza suscita el recorrido francés desde la salida del nuevo túnel hacia Bedous, Oloron y Pau. Se dice que Pau-Oloron serán de primerísima categoría. Tampoco vemos difícil, si hubiera voluntad, seguir hasta Bedous con grandes mejoras. Queda la duda de si será digno acceso del nuevo túnel la carretera nacional francesa 134, desde Bedous a Urdos, ya cerca del túnel. Esperemos que el real esfuerzo perforador de este momento será seguido removiendo rocas y venciendo la aspereza del Alto Valle de Aspe.

Optimistas son también los trabajos administrativos para prevenir seguridades, frente a tráficos peligrosos por el túnel y los propósitos de digna recepción de lo que venga, con información general y turística. Aventuremos alguna fecha de plenitud. Digamos que en el año 2000 ó en el 2005 ó 2010 Pau-Túnel-Zaragoza serán un ejemplo impecable y europeizante.

Pasemos al tren. Muy pocas esperanzas de renovación del tráfico por Canfranc, a pesar de los esfuerzos románticos de CRELOC y CREFCO, con nobles idealistas. Y demasiado lejano y en exceso ambicioso el supertúnel bajo el Vignemale. No se le puede comparar con el túnel del Canal de la Mancha, éste uniendo ciudades millonarias como París y Londres. A la vez el avance del AVE español, el Madrid-Zaragoza-Barcelona-Frontera francesa, se lanza más al Sur que lo actual, entre Zaragoza y Lérida y se aleja de lo puramente altoaragonés hacia el Pirineo. Y se habla de “urbanizar” gran parte de los miles de metros de terreno hoy ferroviario en la gran estación internacional.

Nos hemos extendido hablando de enlaces Zaragoza-Pau o Sur-Norte. En el Oeste la dirección Jaca-Pamplona necesitaría un impulso político considerable de las dos autonomías aragonesa y navarra. Son recientes movimientos empresariales. Es una realidad el uso turístico hacia la nieve, pero se necesitarían estudios serios. Hace 80 años la misma aspiración se concretaba en el ferrocarril de vía estrecha de Sangüesa a Jaca.

Queda la dirección Este. Lo inmediato es que llegue a total definición y arranque, desde Sabiñánigo-Yebra hacia el Valle del Ara y mejoren las carreteras intervalles de la zona Alto Cinca.

Brindamos estas líneas a quienes nos sobrevivan 40 o 50 años, y contemplen en la mitad del siglo XXI un complejo viario que suelde el centro pirenaico español con la Francia verde y llana y en que de veras haya sólo Pirineos para la amistad unitiva.

JUAN LACASA LACASA

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