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"Los afanes de una vida"
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UN CANFRANC FRANCIA ITALIA25/10/1979 |
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La bondad de un amigo parisino relacionado con Jaca nos hace llegar un recorte del diario Le Figaro de 8 Octubre actual, con muy precisos detalles del restablecimiento estas fechas de la línea ferroviaria Turín-Niza, o Turín-Vintimille. Es casi asombroso el paralelo que puede trazarse entre esa relación de trenes Francia-Italia y la nuestra España-Francia por Canfranc. La francoitaliana es un trazado de unos 70 kilómetros que enlazan la ciudad industrial de Turín en el norte de Italia y la costa mediterránea en zona fronteriza, por el valle de la Roya y con puntos más o menos conocidos Coni en Italia y Breil en Francia. Se atraviesan los Alpes Marítimos, con el collado de Tende a 1.000 metros de altura. Esto ya es similar con nuestros 1.100 metros de la boca del Somport en Francia y los 1.200 redondos en Canfranc. Este trazado Francia-Italia se comenzó en 1904 pero se inauguró en 1928, exactamente como el Canfranc. Destruidos por la guerra unos 47 kilómetros en 1940, ha estado interrumpida casi cuarenta años tras funcionar solo 12. Siguen así las similitudes con Canfranc, que en 50 años de vida ha estado parado unos quince por diversas incidencias. Imaginamos la inacabable e incansable gestión italiana, paralela a la nuestra frente a Francia para lograr el restablecimiento. Se han gastado unos 2.250 millones de pesetas, con aportación italiana superior al 90 por ciento, en reconstruir los dichos 47 kilómetros, con 49 túneles y 20 puentes y viaductos, algunos de aquellos en S o helicoidales, enormes muros y demás. Se ha elegido ahora la tracción Diesel y no la eléctrica, sin duda por no aumentar la inversión reconstructora. Está funcionando con nueve servicios de ida y vuelta diarios, tres veces más pues que los tres habituales por Canfranc. La ceremonia reinauguradora ha tenido la presencia de los ministros de Transportes de los dos países y del poderoso presidente de la empresa francesa SNCF, tan reticente frente al Canfranc. Mi padre había recorrido esa línea italofrancesa en 1934 y me hablaba de sus accidentes. También nosotros, la actual generación española, la hemos esgrimido frente a Francia en las negociaciones como paralelo a lo nuestro. El modesto juicio, ante estos hechos, es de fundada esperanza para el Canfranc. Allí lo tenían mucho peor, más largo, más caro, menos activos en etapa anterior. Y sin embargo han triunfado. A lo largo de decenios hay una lógica que vence, ayudando a regiones modestas frente a la rigidez técnico-financiera de las grandes empresas estatales como las ferroviarias y por ello también aquí se triunfará. JUAN LACASA LACASA |